El CEO de Apple, Tim Cook, parece haber construido una relación funcional, si no amistosa, con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Puede enfrentar críticas por ello, pero Forbes describió cómo el Sr. Cook ha hecho esto y los beneficios para su empresa.
Como CEO abiertamente homosexual y partidario de Dreamers, Cook puede sentir cierto desdén personal por las políticas de Trump, pero como CEO de Apple, Cook ha encontrado una manera de enhebrar la aguja política y prosperar bajo el líder quijotesco. Apple ahorró $ 43 mil millones al tener la capacidad de repatriar $ 238 mil millones en virtud del proyecto de ley de impuestos de 2017 defendido por Trump y los republicanos. Las acciones de Apple han subido más de un 60% desde la advertencia de Cook en enero de que las ventas vacilantes en China hicieron que las acciones cayeran a un mínimo de un año. Otras acciones tecnológicas han tenido un buen desempeño desde entonces, pero pocas tan bien como Apple. A pesar de todas las fanfarronadas y las charlas arancelarias de Trump, sus acciones han sido selectivas y sus resultados han sido mixtos. Cook ha forjado diligentemente una relación especial con Trump que ha permitido en gran medida a Apple evitar la peor parte de los aranceles, impulsando así la importante inversión de Apple en China y calmando los temores de los inversores que de otro modo podrían preocuparse por el futuro de Apple.
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