Todas las Noticias en Películas, Avances de Películas y Reseñas.

Drones de asistencia que imitan la anatomía de las aves

Además de los modelos más tradicionales, en los últimos años han proliferado nuevos modelos de drones diseñados para usos específicos.

Imitando la anatomía de las aves, principalmente sus alas y su facilidad de movimiento, estos modelos podrían usarse para responder a emergencias o para cazar otros drones que representen una amenaza para la seguridad.

Drones inspirados en pájaros

El proyecto GRIFFIN, liderado por el profesor Aníbal Ollero, ingeniero eléctrico de la Universidad de Sevilla en España, busca crear prototipos de aves robot altamente autónomas y ultraligeras, capaces de minimizar el consumo de energía en vuelo, aterrizar en superficies curvas y realizar tareas con extremidades móviles y picos artificiales.

Para lograr este nivel de eficiencia, el proyecto pretende aprovechar el viento y los flujos de aire e interactuar de forma inteligente con las personas y el medio ambiente.

Otras ventajas destacadas, además del potencial de eficiencia energética, son la reducción del ruido durante el vuelo y la reducción de posibles accidentes, debido a la ausencia de hélices y al predominio de materiales ligeros.

Inicialmente se proyectan como usos de esta tecnología el rescate remoto de heridos, la toma de medidas biométricas e incluso la aplicación de mascarilla en contextos de riesgo para asistencia directa.

Otros usos previstos para esta tecnología es la llamada “inspección por contacto”, en ámbitos industriales para casos de, por ejemplo, presencia de gases o materiales corrosivos, que podrían ser evaluados o tratados con este vehículo robótico no tripulado.

Las primeras pruebas realizadas con este pájaro robótico han conseguido ejecutar rutas de vuelo tanto en interiores como en exteriores, probando con éxito su capacidad para aterrizar en una plataforma cuadrada de entre 20 y 30 centímetros de ancho.

Recomendado:  La forma más fácil en 2023 [Image Guide]

El equipo detrás del proyecto GRIFFIN continuará perfeccionando esta tecnología. Los próximos retos pasan por perfeccionar el aterrizaje en zonas curvas, mejorar el sistema de agarre por uno más versátil e integrar mecanismos de aprendizaje automático para potenciar estas herramientas.

“Lo que queremos demostrar son estas capacidades combinadas: poder volar ahorrando energía, poder aterrizar y poder manipular sus extremidades como un pájaro”, comentó Ollero al respecto.

Otras tareas en agenda de este equipo se centran en la coordinación de todas las funciones implicadas en el funcionamiento de este ejemplar, puliendo aspectos complejos como la transición entre el aleteo y el desplazamiento de este vehículo durante el vuelo, así como su lectura y dependencia de las fluctuaciones ambientales, que concentran una parte importante de la imprevisibilidad.

Gracias a la existencia de componentes miniaturizados, el peso de este vehículo no tripulado es bastante reducido, condición que limita su capacidad de carga. Aunque este aspecto también podría trabajarse en el futuro, estos “pájaros” pueden transportar dosis de medicación y llevar integrados a bordo ordenadores y cámaras, como apoyo a la navegación visual.

Aunque las proyecciones apuntan a 2030 como posible periodo de despegue de esta tecnología en usos prácticos, este primer informe nos presenta un nuevo modelo que, de consolidarse lo suficiente, podría empezar a circular.

El informe sobre este proyecto fue publicado en horizontela revista científica de la Unión Europea.