El Apple Hearing Study ha compartido estadísticas de sus participantes (n = desconocido) que muestran que muchos experimentan niveles de sonido peligrosos. Para 2050, la OMS estima que más de 700 millones de personas en todo el mundo experimentarán una pérdida auditiva profunda.
Estudio de audición de Apple
El estudio se lleva a cabo en colaboración con la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Michigan y los datos se comparten con la iniciativa Make Listening Safe de la Organización Mundial de la Salud. Aquí hay algunas estadísticas encontradas hasta ahora:
El 25% de los participantes experimenta una exposición media diaria al sonido ambiental (que puede incluir tráfico, maquinaria, transporte público, etc.) que es superior al límite recomendado por la OMS. Casi el 50% de los participantes ahora trabaja, o ha trabajado anteriormente, en un lugar de trabajo ruidoso. La exposición semanal promedio de los auriculares para uno de cada 10 participantes es más alta que el límite recomendado por la OMS. Alrededor del 10% de los participantes del Apple Hearing Study han sido diagnosticados con pérdida auditiva por un profesional. De estos, el 75% no usa soporte de asistencia, como un audífono o un implante coclear, a pesar de que estos dispositivos pueden ayudar a reducir los impactos de la pérdida auditiva. El 20% de los participantes tiene pérdida de audición en comparación con los estándares de la OMS, y el 10% tiene una pérdida de audición que es consistente con la exposición al ruido. Casi el 50% de los participantes no se ha sometido a una prueba de audición por un profesional en al menos 10 años. El 25% de los participantes experimentan zumbidos en los oídos algunas veces a la semana o más, lo que podría ser un signo de daño auditivo.
Rick Neitzel, profesor asociado de ciencias de la salud ambiental en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Michigan:
Incluso durante esta pandemia, cuando muchas personas se quedan en casa, todavía vemos que el 25 por ciento de nuestros participantes experimentan altas exposiciones al sonido ambiental. Los resultados de este estudio pueden mejorar nuestra comprensión de las exposiciones potencialmente dañinas y ayudar a identificar formas en que las personas pueden proteger proactivamente su audición.
