Google quiere proteger la privacidad de los usuarios y tiene planes de implementar “tecnologías de preservación de la privacidad” en lugar de cookies de terceros con fines publicitarios específicos. La empresa, cuyo negocio se basa en gran medida en la publicidad, quiere compatibilizar dos conceptos que no se llevan demasiado bien: publicidad y privacidad.
Parte del cambio de Google hacia la privacidad pasa por la eliminación de las cookies de terceros, que son una de las formas de rastrear a los usuarios en el navegador. La empresa ha aclarado que, cuando las cookies desaparezcan, no crearán nuevos identificadores para rastrear a los usuarios en la web. En cambio, dependerán de tecnologías de anonimización, agregación y cohortes de usuarios con perfiles similares.
Adiós cookies de terceros
Las galletas llevan ya casi 30 años entre nosotros. Nos permiten mantener abiertas sesiones en páginas web, guardar datos y preferencias en el navegador; pero son el principal impulsor del seguimiento de usuarios.
Google lleva un tiempo preparando el terreno para acabar con las cookies de terceros. Algunos navegadores como Safari, Brave y Firefox ya bloquean algunas cookies. Es por eso que Chrome planea hacer lo mismo en 2022.
Google está preparando tecnologías que preservan la privacidad para publicidad dirigida
Mientras tanto, Google ha estado trabajando en diferentes iniciativas bajo el paraguas de Privacy Sandbox, para hacer lo mismo que con las cookies, pero de forma diferente y sin identificar al usuario, como los tokens de confianza. Google ha querido ahora aclarar sus intenciones de que en la era post-cookies no crearán un nuevo identificador de usuario con el que realizar un seguimiento de los usuarios. Además, tampoco utilizarán estos identificadores personales en sus productos.
Esto no significa que Google vaya a tirar la toalla con la publicidad personalizada. En cambio, cambiará la forma en que personaliza dicha publicidad sin identificadores personales. La idea es utilizar cohortes o grupos de usuarios que tengan hábitos de navegación similares. Por ejemplo, “personas a las que les gusta Jack Russels”.
