En el futuro, cuando queramos hacernos un selfie, podremos lanzar un minidron desde el teléfono, dejar que tome la foto y guardarla nuevamente en el interior.
Esto es lo que muestra una nueva patente de Vivo publicada en la OMPI, un teléfono con un pequeño dron con una cámara en su interior.
La idea es la que se ve en la figura: un dron diminuto y muy delgado sale de la parte superior del teléfono, despega con diminutos rotores, vuela para tomar la foto deseada y luego se vuelve a acoplar para cargar y almacenar, sin explicaciones de cómo. para conducirlo desde el móvil (no es fácil pilotar un drone sin experiencia).
Seamos claros en un punto: una patente no es una invención, sino una idea protegida. Puede que nadie llegue a fabricar nunca ese móvil con un dron en su interior, pero si alguien lo hace tendrá que pagar los derechos de la patente a Vivo.
Lo que se sabe es que el dron se alimentaría de la batería del celular y que el propio celular sería el encargado del control remoto y toma manual de la foto, aunque si algún día fabrican algo así, seguramente tendrá un sistema inteligente. sistema que hará gran parte del trabajo de forma autónoma.
Mucho tendría que cambiar para que un celular tenga espacio en su interior para guardar un drone, pero bueno, hemos visto cosas más raras en los últimos años, así que la esperanza es lo último que se puede perder. Seguramente la idea de tener un dron en la muñeca, a modo de pulsera, que se activa con el móvil, sea más factible, aunque el peligro de echarle un ojo al vecino a causa de un selfie siempre estará ahí, presente.
