La última década ha sido una montaña rusa para muchas marcas, incluida Samsung. El que sigue siendo el principal fabricante de móviles del mundo, con una presencia muy relevante en los mercados de todo el mundo, ha tenido éxitos variables con sus teléfonos de gama alta.
Los Galaxy S han sido desde el principio una de las familias Android más icónicas, pero no siempre se han vendido igual de bien.
El año pasado, con el lanzamiento del Galaxy S20, las ventas de terminales de gama alta se vieron perjudicadas, al menos si las comparamos con las de sus antecesores, los Galaxy S10 y S9.
En el gráfico de M. Science, vemos cómo el teléfono de 2020 no cumplió con las expectativas. La pandemia, que estalló en todo el mundo poco después de la presentación de estos teléfonos, probablemente tenga parte de culpa.
Sin embargo, 2021 parece más positivo para la empresa, ya que los primeros informes de ventas comparativos indican que el S21 ha vendido más que los S20.
Pero no sólo eso. Según cifras de los medios coreanos., los Galaxy S21 se venden mejor que los S10 y S9. Tendríamos que volver al Galaxy S8 para ver un buque insignia de la compañía que se vende mejor.
En el primer mes de ventas, el S21 registró 590.000 unidades, el doble que el S20 en el mismo período y más que el S10 y el S9. El S8 lo superó por poco con 620.000 unidades.
Los S21 lideran el camino para Samsung
Este cambio de rumbo no es casualidad y Samsung ha tomado buenas decisiones con el S21. Para empezar, ha bajado el precio de los modelos del año pasado, aunque ha quitado los cargadores de la caja.
También ha dejado claro que el Ultra será el buque insignia y en el S21 y S21 Plus ha decidido recortar características en algunas áreas clave para contener aún más el coste.
Habrá que esperar hasta final de año para ver las cifras totales de ventas de la familia respecto a modelos anteriores pero, si Samsung quiere seguir por este camino, sabe que tiene que hacer lo que ha hecho este año.
