Usando una combinación de inteligencia artificial compleja y herramientas como señales simples, WhatsApp analiza dos millones de cuentas cada mes para eliminar las cuentas maliciosas.
Alrededor de las tres cuartas partes de las manzanas podridas se detectan sin informes externos, y el veinte por ciento de dichas tres cuartas partes se detectan en la etapa de registro.
VentureBeat detalla el enfoque empleado por WhatsApp para capturar y descartar las cuentas malas: la tecnología de aprendizaje automático que detecta los patrones subyacentes a las cuentas malas detectadas anteriormente utiliza la información para buscar nuevas cuentas malas. Además, la empresa reiteró que la mensajería masiva viola los términos de servicio de WhatsApp y que “detener este tipo de abuso” es una de las principales prioridades de la empresa.
Algunas de las “señales” que actúan como banderas rojas instantáneas son:
Una discrepancia geográfica entre la dirección IP y el número de teléfono. La cantidad promedio de mensajes enviados por una cuenta. El tiempo necesario después del registro para comenzar a enviar mensajes masivos.
WhatsApp también ha investigado varias formas que emplean los spammers para eludir el límite de 20 mensajes impuesto en la aplicación. Por ejemplo, ciertas aplicaciones permiten que varias instancias de la misma aplicación (y cuenta) se ejecuten en un solo teléfono. Además, ciertos dispositivos especiales que pueden llevar “docenas” de tarjetas SIM a la vez.
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