Desafortunadamente, Windows 10 vuelve a ser inestable después de una actualización. Y a diferencia del año pasado, cuando el principal problema se produjo con una de las dos grandes actualizaciones del año (Windows 10 20H1), en esta ocasión el problema está asociado a una actualización menor, de esas que se suelen aplicar de forma automática y que, aunque con excepciones, generalmente no suelen suponer ningún problema.
Si recientemente actualizó Windows 10 con las actualizaciones KB4598299 y KB4598301, quizás haya encontrado algún problema en su sistema. Y, en caso de que no lo hayas hecho, es posible que esto ocurra en el futuro.
Los usuarios han comenzado a informar fallas en múltiples aplicaciones y, en algunos casos, incluso los sistemas entran en un bucle de pantallas azules de las que no pueden salir.
Las actualizaciones mencionadas, y por tanto el problema, se limitan a Windows 10 20H2, 20H1 (2004) y 1909, es decir, las tres actualizaciones más recientes y, por tanto, más extendidas en la actualidad.
Las actualizaciones con las que se ha presentado este problema están encaminadas a realizar algunas mejoras en .NET Framework 3.5 y 4.8, principalmente solucionando problemas, pero también añadiendo alguna mejora en el funcionamiento de ciertos elementos. Las actualizaciones de .NET Framework se instalan automáticamente al buscar actualizaciones en Windows Update.
Si bien la mayoría de los problemas se han informado con Windows 10, el error también afecta a Visual Studio, Windows Presentation Foundation (WPF) y otros productos. Varios foros de soporte han publicado mensajes que mencionan incidentes potencialmente relacionados con esta actualización. Y uno al que vale la pena prestarle atención es este de Vasilios Magriplis en la comunidad de desarrolladores utilizando herramientas de Microsoft.
En él podemos leer que al poco de instalar la actualización KB4598299 de Windows 10 empezó a tener problemas con Visual Studio, problemas que acaban con la aplicación colgándose. Y digo que este mensaje es especialmente interesante porque, en las respuestas al mismo, podemos encontrar la confirmación por parte de Microsoft de que ha identificado el problema, que está asociado a la actualización, y que ya han encontrado la solución, que está pendiente de resolver. ser publicado.
Mientras tanto, hasta que esté disponible, la única solución es desinstalar las actualizaciones conflictivas de Windows 10. De lo contrario, todo apunta a que la solución se lanzará en algún momento de la próxima semana.
