Desde principios de este año, Clubhouse se define como la nueva red social de moda. Se trata de una plataforma basada en audio que, aunque se lanzó en el sistema operativo iOS en abril de 2020, registró su mayor crecimiento en enero de 2021. Sólo se puede unir mediante invitación, aunque sus creadores han prometido que se abrirá al mundo en los próximos meses.
Su modelo de negocio ha llamado mucho la atención, pero también plantea dudas sobre la privacidad. Para empezar, esta web registra tus conversaciones o puede conservar tus datos si un amigo regala sus contactos sin que tú lo sepas, y existen otras políticas respecto al uso de Clubhouse que han generado dudas sobre si el usuario no está poniendo sus privacidad en riesgo.
Hace unos días una investigación del Stanford Internet Observatory (SIO) afirmó que la red social Clubhouse ha presentado problemas de seguridad que han permitido al gobierno chino tener acceso a los datos de los usuarios. En concreto, los investigadores de Stanford han afirmado que incluso es posible que se haya accedido a los datos brutos de las conversaciones, junto con metadatos que incluyen el ID de la aplicación y el ID de la reunión o sala. Esos datos se transmitieron sin cifrar y en texto plano.
Además, Clubhouse confirmó hace unos días que experimentó una violación de datos el pasado domingo 21 de febrero porque un usuario se dio cuenta de que podía estar en varias salas a la vez, conectó la API de Clubhouse a su sitio web y compartió su inicio de sesión con cualquier persona en la web que Quería escuchar chats de voz desde la aplicación.
Además de estas controversias, existen otros problemas con el funcionamiento básico de Clubhouse que pueden plantear problemas de privacidad para sus usuarios.
Cuatro prácticas de Clubhouse que causan preocupaciones sobre la privacidad
- Clubhouse graba tu audio. Una de las “características” de Clubhouse es que es efímera. Sólo puedes escuchar lo que está sucediendo en este momento. No puedes guardar conversaciones para más tarde, ni puedes pausar la sala en la que te encuentras. Tienes que presentarte en vivo para participar en la experiencia. Eso es algo que lo diferencia, por ejemplo, de los podcasts, que se graban y se pueden escuchar en cualquier momento. Sin embargo, a pesar de eso, Clubhouse puede registrar, y lo hace, lo que usted dice.
- Específicamente, la política de privacidad de la aplicación establece: “Para respaldar las investigaciones de incidentes, grabamos audio temporalmente desde una habitación. Si un usuario informa una infracción de política o un incidente de seguridad mientras la sala está activa, conservamos el audio para investigar el incidente y no lo eliminamos hasta que se complete la investigación. Si no se reporta ningún incidente en una sala, eliminamos la grabación de audio temporal cuando finaliza la sala”. Ahora, como explica Inc, si alguien reporta un problema, todo lo que sucedió en la sala se registra y guarda, mientras que Clubhouse no deja claro qué sucede entonces. No dice quién puede escucharlo ni en qué condiciones.
- Otras personas comparten información sobre usted sin que usted tenga ningún control sobre ella. Esta aplicación es sólo por invitación. Incluso si optas por no crear una cuenta para acceder a Clubhouse, si un amigo o conocido tuyo ha dado tus datos, no hay nada que puedas hacer al respecto. Cabe recordar que la aplicación incentiva a los usuarios a cargar toda su base de datos de contactos para enviar invitaciones y no da la posibilidad de compartir solo contactos específicos. Hay que compartir todo o nada, eso obliga a los usuarios a dar muchos más datos de los que querrían, y no los propios.
- Además, estas personas que deciden compartir su lista de contactos no sólo dan el nombre. Si conectan sus perfiles en redes sociales también se recoge esa información. Clubhouse dice específicamente que cuando “crea su cuenta y/o se autentica en un servicio de terceros como Twitter, podemos recopilar, almacenar y actualizar periódicamente información asociada con esa cuenta de terceros, como listas de amigos o seguidores. “
- Información personal y cómo se financiará este negocio. En general, es motivo de controversia cómo las redes sociales comercializan los datos de sus usuarios a terceros para ganar dinero, mientras las empresas ofrecen publicidad personalizada a cada persona. El lanzamiento que Apple está preparando para ayudar a sus usuarios a bloquear la capacidad de Facebook para recopilar información personal ha vuelto a poner esta cuestión sobre la mesa.
- ¿Cómo gana dinero Clubhouse? Según Inc, una de las mayores interrogantes que rodean a esta red social es cómo pretende ganar dinero. Si analizamos la política de privacidad, queda claro que probablemente incluirá algún tipo de sistema de publicidad o patrocinio. Para prepararse para esto, Clubhouse deja en claro que “puede compartir datos personales con nuestros afiliados actuales y futuros”. Esa misma sección deja claro que Clubhouse “puede compartir las categorías de Datos personales descritas anteriormente sin avisarle”. Eso significa que no te notifica cuando esa información personal, previamente proporcionada a Clubhouse, está siendo utilizada por terceros.
- Clubhouse rastrea a sus usuarios. La política de privacidad de la compañía dice que utiliza cookies, píxeles y tecnologías de seguimiento para monitorear lo que hace dentro de Clubhouse, en toda la web, aunque actualmente no están monetizando la aplicación. La política de privacidad de la compañía dice explícitamente que pueden “compartir datos identificables y datos de actividad en Internet con plataformas de redes sociales y otros socios publicitarios que utilizarán esa información para ofrecerle anuncios dirigidos en plataformas de redes sociales y otros sitios web de terceros, según ciertas regulaciones”.
- Así pues, todo apunta a que, aunque ahora la nueva red social de moda no está ganando dinero, se está preparando para monetizar la plataforma que está construyendo, gracias a los datos de sus usuarios.
