En su libro Atomic Habits, nĂşmero 1 en ventas del New York Times, James Clear comentĂł que hay tres problemas centrales con las metas:
Los ganadores y los perdedores tienen las mismas metas Alcanzar una meta es solo un cambio temporal Las metas restringen tu felicidad
Cuando leĂ eso por primera vez… Me sentĂ como si hubiera encontrado un oasis despuĂ©s de vagar por un desierto ardiente y seco durante años.
TĂłmelo de alguien que intentĂł “establecer objetivos” durante años pero nunca llegĂł a ninguna parte: si desea ser 10 veces más productivo, deje de establecer objetivos y comience a construir sistemas.
Mira, “establecer metas” nunca funcionĂł realmente para mĂ, lo que me llenĂł de frustraciĂłn y autodesprecio. IntentĂ© todo. LeĂ todos los libros. Todos decĂan lo mismo: las metas eran la Ăşnica forma de tener Ă©xito de verdad. Si no tenĂas buenas metas, decĂan, nunca tendrĂas Ă©xito.
Entonces, Âżpor quĂ© no podĂa seguir adelante ni siquiera con una pequeña meta? ÂżQue pasa conmigo? Me preguntĂ© a mĂ mismo. ÂżEra perezoso? ÂżIndisciplinado? ÂżEstaba condenado a nunca alcanzar mis sueños?
Por ejemplo: yo habĂa estado tratando de “ir al gimnasio” durante años. TenĂa sobrepeso y estaba fuera de forma, y ​​en un momento, ponerme en forma fue mi objetivo nĂşmero uno.
Recuerdo que me comprometĂ por completo. Fui a un sitio web de culturismo y descarguĂ© un plan de entrenamiento y nutriciĂłn de 16 semanas. ComprĂ© una membresĂa costosa para un gimnasio. PubliquĂ© en las redes sociales para que la gente pudiera hacerme responsable. Me comĂ todas mis comidas favoritas la noche anterior y luego comencĂ© mi plan de 16 semanas.
La primera semana fue dura, pero esperaba eso. Fui al gimnasio cinco veces. ComĂ ensaladas y pechuga de pollo a la parrilla y bebĂ solo agua.
La segunda semana fue aĂşn más difĂcil. Fui al gimnasio cuatro veces. Me estaba cansando de las ensaladas.
Llegó la tercera semana y casi me quebranto. Fui al gimnasio dos veces e hice trampa en mi dieta al comer comida rápida un par de veces.
La cuarta semana, dejé de ir al gimnasio.
Esto es lo que significaba para mà “establecer metas”. Esto es lo que experimentĂ© cada maldita vez: tratar de ahorrar dinero, perder peso, comer más sano, escribir mi libro, iniciar un negocio, lo que sea. Los objetivos simplemente no parecĂan funcionar para mĂ.
Y finalmente, finalmente, alguien describiĂł las metas de una manera que tenĂa sentido: eran temporales, difĂciles y nada divertidas.
AsĂ que abandonĂ© los goles para siempre. Y desde entonces, he sido 10 veces más productiva. ComencĂ© consistentemente logrando objetivos realmente enormes que nunca pensĂ© que terminarĂa:
FirmĂ© mi primer contrato para un libro y publiquĂ© mi primer libro RenunciĂ© a mi trabajo de 9 a 5 y me convertĂ en un empresario de seis cifras a tiempo completo trabajando para mĂ mismo GanĂ© más de 100 000 seguidores y suscriptores Más de tres millones de personas han leĂdo mi trabajo en el pasado Par de años
Los objetivos no me funcionaban. Pero los sistemas estaban cambiando mi vida en todas las áreas.
Por qué los sistemas son la mejor estrategia n.° 1 para lograr objetivos enormes de manera consistente
No soy anti-goles. Las metas son Ăştiles en ciertas situaciones. Como Scott Adams, creador de los cĂłmics de Dilbert, escribiĂł una vez:
Los objetivos funcionan muy bien para situaciones simples. Pero el mundo rara vez es simple en estos dĂas.
No sabes cĂłmo será tu carrera dentro de un año. No sabes quĂ© estará haciendo la economĂa o quĂ© nuevas tecnologĂas llegarán a la escena.
Tu vida personal es igual de impredecible…
Entonces, en lugar de metas, pruebe sistemas que mejoren sus probabilidades de Ă©xito (sin importar cĂłmo defina el Ă©xito) con el tiempo.
Elija proyectos que mejoren su valor personal sin importar cĂłmo lo haga el proyecto en sĂ. Encuentre sistemas para la dieta y el estado fĂsico que reemplacen la fuerza de voluntad con conocimiento simple.
Esta es la diferencia entre objetivos y sistemas (y por qué los sistemas son mucho mejores):
Los objetivos se tratan de seguir rutinas, poniendo una cierta cantidad de esfuerzo para (con suerte) alcanzar una fecha lĂmite. Los buenos objetivos son supuestamente especĂficos, medibles, alcanzables, relevantes y basados ​​en el tiempo.
Por otro lado, los sistemas tienen que ver con la consistencia, haciendo pequeños progresos todos los dĂas. Los sistemas se aseguran de que siempre tenga suficiente energĂa sobrante para el dĂa siguiente.
Después de años de construir sistemas para mis relaciones, salud, carrera, dinero y mentalidad, me di cuenta de que los sistemas son la mejor estrategia número 1 para lograr grandes objetivos de manera constante.
Cuando escribĂ mi libro, tratĂ© de ponerme metas: “escribir 1000 palabras al dĂa” o “terminar un capĂtulo cada semana”, cosas asĂ.
Eso no funcionó. En realidad, esos objetivos solo me hicieron sentir más estresado, ansioso y frustrado conmigo mismo porque me retrasé muy rápido.
Luego tratĂ© de usar los sistemas. En lugar de conteos de palabras o plazos, solo me concentrĂ© en escribir un poco cada dĂa. Me di muchos descansos. Fui amable conmigo mismo. Siempre me aseguraba de tener suficiente energĂa para el dĂa siguiente.
A finales de ese mes, casi habĂa terminado de escribir todo el libro. HabĂa escrito alrededor de 10 veces más ese mes porque no estaba desperdiciando energĂa tratando de seguir metas.
Lo mejor de todo, ¡me estaba divirtiendo haciĂ©ndolo! No me estaba enfadando conmigo mismo por quedarme atrás o azotarme para trabajar más duro y cumplir con mi fecha lĂmite. Recuerde, las “metas” son temporales y se basan en cronogramas logĂsticos, no en el comportamiento humano real. Los sistemas le permiten tiempo y espacio para ir a su propio ritmo.
Mucha gente desperdicia una enorme energĂa innecesaria tratando de hacer frente a metas difĂciles; si se atrasan incluso uno o dos dĂas, la vergĂĽenza y la frustraciĂłn comienzan a entrar en su forma de pensar (incluso si está progresando).
Los sistemas no desperdician energĂa, te permiten generar un impulso poderoso, que es la parte más importante.
Cómo crear un impulso imparable y lograr su plan de diez años en seis meses
Hace treinta años, mi hermano mayor, que tenĂa diez años en ese momento, estaba tratando de escribir un informe sobre aves que habĂa tenido tres meses para escribir, que debĂa entregar al dĂa siguiente. Estábamos en nuestra cabaña familiar en Bolinas, y Ă©l estaba en la mesa de la cocina al borde de las lágrimas, rodeado de papeles y lápices y libros sin abrir sobre pájaros, inmovilizado por la inmensidad de la tarea que tenĂa por delante. Entonces mi padre se sentĂł a su lado, puso su brazo alrededor del hombro de mi hermano y dijo: “Pájaro por pájaro, amigo. Solo tĂłmalo pájaro por pájaro”. – Anne Lamont, pájaro por pájaro
La mayorĂa de las personas nunca generan un impulso cuando intentan alcanzar sus objetivos. Golpean badenes; se ocupan en el trabajo, se desmotivan, se dan un atracĂłn de distracciones y entretenimiento. Ese es el punto que la mayorĂa de la gente abandona, sin lograr prácticamente nada.
Pero cuando genera impulso, es como si no pudiera dejar de progresar incluso si lo intentara. Es como un tren fuera de control: simplemente seguirá adelante, incluso si se queda sin combustible. El impulso lo lleva a cabo. Ese es el poder del Ămpetu, y si puedes aprender a generar un Ămpetu imparable en tu vida, podrás lograr tus objetivos más importantes en unos pocos meses.
La clave para generar impulso es la repeticiĂłn. Si puede hacer algo todos los dĂas, incluso si es aburrido y tedioso, puede generar un enorme impulso que no se puede detener. Una vez que cree estos hábitos, se encontrará haciendo un gran progreso sin siquiera sentir que lo está intentando. Como escribiĂł una vez el exitoso autor David Kadavy: “Cuando creas un hábito, no tienes que gastar energĂa mental decidiendo quĂ© hacer”.
El problema es que la mayorĂa de la gente no quiere superar el aburrimiento. En palabras del autor de best-sellers Hal Elrod, “La repeticiĂłn puede ser aburrida o tediosa, razĂłn por la cual tan pocas personas logran dominar algo”.
Incluso si no sabe los próximos pasos exactos a seguir, probablemente al menos sepa la dirección que debe tomar para lograr sus objetivos más importantes.
Ese camino siempre requiere muchos ejercicios repetitivos, el dominio siempre los requiere.
ÂżEstás dispuesto a superar el aburrimiento de la consistencia? Si es asĂ, puede lograr el dominio y las habilidades que la mayorĂa del mundo no logrará. Si estás dispuesto a hacer lo que la mayorĂa de la gente no hace, puedes conseguir cosas que la mayorĂa de la gente nunca tendrá.
Las personas exitosas hacen lo que las personas fracasadas no están dispuestas a hacer. – Autor de superventas Darren Hardy
Cuando comienza a generar impulso, rápidamente se da cuenta de que sus objetivos a largo plazo pueden lograrse extremadamente rápido. Una vez que deja de perder el tiempo tratando de cumplir con los plazos y simplemente trabaja, su vida sufre un cambio dramático.
Una vez que haces del progreso tu enfoque principal, comienzas a generar impulso en cada área de tu vida. Pronto, comenzarás a lograr cosas en una semana que, por lo general, a las personas les lleva seis meses completar.
ConclusiĂłn
Algunas personas pueden seguir rutinas predecibles a lo largo de la semana; van al gimnasio, compran comestibles y duermen los mismos dĂas a la misma hora la mayorĂa de las semanas.
Pero para la mayorĂa de las personas, seguir estas rutinas es casi imposible. Tratar de mantenerlos conduce a la frustraciĂłn y el agotamiento, lo que solo hace perder más tiempo y te hace sentir peor contigo mismo.
En su lugar, solo concĂ©ntrese en hacer pequeños progresos, todos los dĂas. Porque si puedes hacer algo todos los dĂas, eventualmente desarrollarás la virtud más fundamental del Ă©xito:
Consistencia.
Mira, la consistencia vence al talento. Le gana a la suerte y a las buenas intenciones. Si eres constante, puedes lograr prácticamente cualquier objetivo que te propongas porque mientras sigas esforzándote, eventualmente lo lograrás.
En una entrevista, se le preguntĂł al actor Will Smith cĂłmo llegĂł a tener una carrera tan exitosa:
Lo único que veo claramente diferente en mà es que no tengo miedo de morir en una caminadora. No seré superado, punto. Puede que tengas más talento que yo, que seas más inteligente que yo, que seas más sexy que yo, que seas todas esas cosas. Pero si nos subimos juntos a la cinta de correr, hay dos cosas: te bajas primero o me muero.
Una vez que cultive esta disciplina, puede generar un impulso imparable, volverse 10 veces más productivo y lograr sus objetivos más importantes en cuestión de meses.
Haz pequeños progresos, todos los dĂas.